DEMENCIA

se apodera como monstruo de los hilos

oprimiendo hasta la asfixia la razón,

confundiendo los tiempos y los sitios

las palabras, los silencios, Dios.

Obstruye los senderos que convergen

en cautos recovecos marginados,

donde apura la presión hasta la muerte

de neuronas que se van secando.

Es la mano que sujeta despiadada

las alas de los vuelos intuidos,

haciendo de  los sueños trampas

de los proyectos olvidos.

Es la grieta que se abre fría

en un intento de espasmo

cerca, abrazada a una risa

pero también dentro del llanto. 

AMOR MÍO

Si me remonto a los instantes compartidos,

me has dado tanto que aún tengo navidades

que la bebida de tu cuerpo con que brindo,

es parte activa en el reguero de mi sangre.

Por esta noche de colores explosivos,

donde el alcohol pone pijamas a los miedos

donde el llanto se revuelca con los ruidos

y la nostalgia aprieta fuerte el pecho...

Por esta noche, amor mío, te rescato

para danzar enajenados en la bruma,

con el ardor de tu deseo en mi cintura,

Y en tu vientre el estruendo de un orgasmo.

Amor mío, te convoco y tu me llamas,

al ocaso suculento de otro sueño

sin palabras, sin contactos, ni miradas,

tu alma y la mía en un solo vuelo.

RESPIRO.

Mis pulmones braman por el alimento,

El mugido apático que ingresa y redime

Como ola brusca que seduce el cuerpo,

y le avisa al alma que aún existe.

Como caravana de glóbulos lentos,

son suplemento de un latido agónico,

pequeñas porciones de aire sin tiempo

que arrastran vestigios de lejanos odios.

Verbo conjugado en banal pretexto

ecos de existencia haciendo catarsis,

Sangrando ironías presas del aliento

Por un solo rato ventilado.

Respiro y expulso con pasión y fuerzas

el aire culpable de soñarte a diario,

átomos sedientos de andar tus venas

buscando la ruta que lleve a tus labios.

Respiro, te pienso,

me pierdo inspirando

llenando de polvos mis vías concreto,

la fase vital de estarte deseando

AUTISTA

Cerrado en posibles, que yacen sin serlo
en blancos con puntos que siempre te atrapan,
vagas por la nube cargada de cielos,
donde un diminuto el total abraza.

Tus ojos se fijan en esa meseta
donde se termina, al fin, el comienzo,
tu mente araña la tierra discreta,
donde la cordura siembra desconciertos.

La noche o el día, la luz o la bruma,
espesas tormentas te ofrecen batalla,
tu cuerpo se eleva en tretas seguras,
aferrado al suelo, que tu sudor baña.

Diagnóstico oscuro, de tratar dudoso
autista te llaman, cerrado en ti mismo
capaz de proyectarte solo por los ojos
crearte la vida, la muerte, el destino...

MUJER

Mujer
Soy esa playa que bebe de tus poros
el sudor que busca el beso de la brisa,
La caricia que se duerme en tu rostro
como manso complemento de la estima.

Soy esa, aquella, la de ayer y todas
mamá que arrulla, amiga, hermana,
la que somete al placer tu boca
y en la que descansas tu efusión mojada.

Soy el vientre donde siembras tu potencia
el mismo en que incubaste tu transcurso,
la gota que te llena en una teta
esa misma con que te seduzco.

Soy el cielo que te brinda mil colores,
las estrellas que te danzan en un trance,
la causal de tu dolor cuando una noche
soy tu deseo de olvidarme.

También soy consecuencia de tus males
la hija que despierta en tus celos,
pues soy y estoy por todas partes
víctima y Verduga de tus miedos.

Soy capaz de darte vida o lastimarte
de cobijarte o hacerte padecer,
porque soy tuya y de mi eres parte
soy nada más y nada menos mujer.

En tus brazos.

En la cuenca de tus brazos me denigro
soy pequeña , suave, inmaculada
como tiempo que trepa en la brisa
como espasmo por si atrapado.

Soy tranquila como si tronara
me desmayo como si vibrase,
exploto en partes distantes
soy vida aunque perezca errante.

Me transformo en la noche que te apaga
o en el día que te palpa las mejillas
en tus brazos soy instante que no acaba
soy abrazo que te aferra y te limita.

Soy pasión asándose en tu sangre,
en tu piel soy animal bizarro
Que solo actúa por saciar su hambre
Para luego dormir en tus brazos.

Soy aliento que por ti respira,
en tu boca de ansiedad bocado,
Todo, nada, dolor y agonía
Principio, fin, soy en tus brazos.

El Camino

Hasta tu puerta el trecho es infinito,
tu espacio dilata si me acerco,
tus manos se evaporan en mis dedos
el tiempo trasmuta en suplicio.

El viaje hasta tu lecho es eterno,
plagado de escombros que me frenan,
camino, corro y a veces vuelo,
pero mis caricias no te llegan.

El sendero se hizo en subida,
como si fuera a llegar al cielo,
donde las nubes livianas me privan
del contacto con tu cuerpo.

Cada noche emprendo el camino,
por sitios serenos de ensueños,
rastreo tus pasos, tu aroma sigo
y en el umbral de tu alma despierto.

Sinuoso el sendero que he recorrido,
brazos cansados, boca sedienta,
los ojos secos, los pies doloridos,
cuando llego otra vez te alejas.

CUANDO VUELVA LA LUZ...

Sonarán distintos aquellos aullidos,
treparán incautos al riesgo tus dedos
temblarás el frío y olerás a río
cuando ilumines, yo seré tu fuego.

Cantaré en tu boca mi mejor poema,
dentro de tus dedos tatuaré caricias,
brillarás del cielo de mi vista austera
cuando seas luz y yo tenga vida...

Cuando siembre en roca y coseche el tiempo
para ser un tope de pasión insana,
allí donde seque sus ropas el miedo,
después que la muerte en sangre se ahogara...

Cuando vuelva el día pisando las sombras
seré un poco sol y otro tanto sexo,
desnudo deseo, tu cuerpo se implota
en un mágico rayo de luz en regreso.

Volverá la luz a abrazar la instancia
el hondo, el hueco de la oscuridad,
tu y yo seremos claros como el alba
cuando volvamos todo volverá.

BEBE

Bebe
De mi boca el sabor del olvido
de mi sangre el ácido permanente
de mis ojos el dolor, bebe conmigo
como el veneno más ardiente

Bebe mis flujos, erupción de espasmos,
llanto de un vientre que en su resaca
vomita el ego de un hambre aciago,
fruto de ausencias y de demandas.

Moja tus labios en mi saliva,
sudor de anhelos que se deforman
unción que en tu lengua transpira,
mi existencia gota agota.

Humecta en mi la punta de tus dedos,
transporte pleno de mis sensaciones,
para que beban en mi piel infierno,
y en mis centros la muerte les estorbe

Embriágate de cauces inventados,
en los lagos escuetos de mi ombligo,
que albergan el caudal en un abrazo,
del sumo ardiente de tus ríos.

ESTOY VIVA

Como cada primavera haciendo gajos,
donando aroma a los olores idos
traspirando por mi poros maltratados,
los recuerdos que viven conmigo.

Estoy viva...

En ese espacio que rodeé de abrazos
en las semillas que hicieron mi tierra,
en las puertas que se han cerrado
en las cicatrices que aún me duelen.

Estoy viva...

Ayer que recorrí, osada
el panorama de tu seducción
hoy que mi sangre relajada,
busca el sendero de tu corazón.

Estoy viva...

Para esperar que un flujo divino
inunde mi alma de un sueño profundo
me disemine en un infinito
y pueda besarte en un beso al mundo.

Estoy viva...

Porque aún conservo en mi mente intactas
siluetas difusas de ese amor secreto,
sonidos pujando en mi boca cerrada,
por decirte una vez más te quiero
Por eso estoy viva.